Matias "El León" Almeyda

Mucha entrega, personalidad y habilidad, son las principales características de Matías Almeyda cuando entra a la cancha para defender los colores de su equipo, al punto que pareciera tener tres pulmones cuando juega, porque a diferencia de los otros jugadores, corre más conforme pasan los minutos. Lo apodaron “El León” en su paso por Europa, seguramente tratando de enfrascar sus cualidades en una sola palabra. Pero seríamos injustos si solo habláramos del Almeyda futbolista, porque fuera de las canchas nos encontramos con una persona, que a pesar de haber viajado por el mundo y haber logrado una buena situación económica, no se olvida de sus raíces y mantiene la humildad que tenía el día que fue a probarse a las inferiores de River, y no fue la excepción esta entrevista, en la que tuvo la deferencia de contar su trayectoria como futbolista tanto en los diferentes equipos que integró, como en la selección.

- ¿Cómo se dio tu llegada a River Plate?
- A los 14 años averigüé las fechas de las pruebas en el club, y luego de varias veces que me hicieron volver finalmente quedé. El problema era que mi familia no podía mantenerme económicamente, pero gracias a la ayuda de mis abuelos y vecinos pude terminar en primera.

- ¿Fue la Copa Libertadores del ´96 el título más importante que lograste en Argentina?
- Si, aparte esa era la segunda que conseguía el club, y en ese momento la esperaba mucho la gente, los dirigentes y nosotros. Creo que River tenía un plantel muy bueno y por suerte la pudimos ganar.

- Ese año mismo jugaste las Olimpiadas, ¿Te quedó un sabor amargo después de perder la final?
- Si, porque vivimos en un país donde solo vale salir campeón, y aparte esa selección había demostrado un muy buen nivel. Creo que lo que más dolió fue perderla en el último minuto, pero no siempre se puede ganar. Además los jugadores nigerianos eran excelentes jugadores.

- Después te vendieron al Sevilla, donde no estuviste en tu mejor nivel.
- Si, me fue mal porque la gente esperaba mucho de mi sin saber en realidad mis características de juego. Me habían contratado como enganche, y el trabajo por el cual me destacaba en River y en la Selección ahí no se veía. Yo jugaba de la misma manera y me “mataban” (se ríe).

- ¿Fue en la Lazio en donde mejor te fue en Europa?
- Es donde empieza a cambiar un poco mi carrera. Ahí jugué tres campeonatos y creo que llegué a mi techo. Además fueron los tres mejores años en la historia del club, donde ganamos casi todo. Fue inolvidable.

- ¿Crees que ayudó al equipo la cantidad de argentinos que tenía?
- Si, sobre todo en el tercer año, porque en los dos primeros solo estábamos “el flaco” Chamot y Yo, pero en el último ganamos el Scudetto que era el título más importante, con la incorporación de Sensini, Simeone y Verón.

- ¿Cómo evalúas tu paso por el Parma?
- Fue positivo. Estábamos por descender y de última ganamos la Copa Italia, que era un título que valía muchísimo por el equipo que teníamos y porque la final fue contra la Juventus.

- Pasando a la selección, en Francia ´98 por desgracia otra vez se quedaron afuera en los últimos minutos.
- Si, en ese mundial éramos todos jóvenes y creo que hicimos un buen papel, le habíamos ganado a Inglaterra y el equipo había jugado bien. Creo que podíamos haber llegado a la final.

- ¿Y el del 2002 cómo lo analizas?
- La verdad fue muy triste, porque todos teníamos adentro que íbamos a llegar a la final, y quedar eliminados en la primera ronda por un penal y un tiro libre nos quebró a todos. La diferencia con el anterior era que la mayoría de los jugadores había llegado en su mejor nivel, tal es así que en la eliminatoria Argentina había arrasado con todo.

- Cambiando de tema ¿cómo viviste la reacción de la gente cuando tomaste la decisión de irte de Independiente?
- Cierta parte de la prensa no me creyó, e hizo que dudaran de mi decisión. Pero a mi no me importa nada de eso, porque en mi vida voy con el corazón y trato de ser honesto. En ese momento me tenía que ir para proteger a mí padre, doliéndome en el alma por tener que dejar mi país.

- Antes de arreglar con Independiente se hablaba de tu posible regreso a River, ¿te molestó que no te hicieran alguna oferta?
- En realidad hubo un momento en el que espere el llamado de River, pero no se dio. Igual respeto a la gente de River, y me queda un recuerdo lindo de la época en la que estuve, pero hoy me interesa solo Quilmes y estoy haciendo fuerza para que mis compañeros hagan un buen campeonato. Lo de River no lo pienso más.

- Con Quilmes tuvieron un buen arranque en la Copa, ¿crees que el problema que sufrieron en Brasil se desencadenó en una eliminación anticipada?
- Eso nos unió más como grupo. No creo que la salida de la Libertadores dependía de ese motivo.

- ¿Alguna vez tuviste algún problema parecido a ese?
- No. Creo que en la historia del fútbol este fue uno de los primeros. Nos tocó vivirlo de cerca, pero el que peor la pasó fue “el chavo” (Desábato). Por suerte ya está casi todo solucionado.

- Ahora que se te venció el contrato con Quilmes, ¿Estás pensando mucho en tu futuro?
- Si, lo estaba analizando en las últimas semanas. Por suerte propuestas no me faltan, tengo mes y medio para meditarlo bien. Mientras tanto voy a seguir entrenando acá en el club.

- Aunque siempre estuviste identificado con River tuviste mucha aceptación de parte de la gente en Argentina, ¿lo sientes?
- Si, la verdad con el tema de los hinchas estoy muy agradecido, porque no siempre uno ha jugado bien, pero han valorado la entrega y el sacrificio que he tenido en cada pelota y eso me llena de orgullo.

Ahora estaremos expectantes de la decisión que tome respecto de su futuro, deseando que su resolución sea seguir jugando, ya que le hace mal al fútbol que este tipo de jugadores abandonen el deporte.